El primer día de la tarjeta de crédito Supercard, que el Gobierno nacional impulsó para la compra en cadenas de supermercados, transcurrió ayer sin demasiado entusiasmo en Tucumán, casi como el movimiento comercial durante el feriado largo. En los principales locales que operan en la capital, los clientes no mostraron tanto interés en averiguar detalles sobre este servicio, según pudo constatar LA GACETA en un relevamiento. Al mismo tiempo, los propios supermercados informaron que aún esperan instrucciones de las casas centrales sobre la implementación de la tarjeta que, según informó el Gobierno, se enmarca en la extensión del congelamiento de precios por 60 días.

Además, ofrece un límite de compra de $ 3.000 y un tope de crédito de $ 1.000. María Robles, auxiliar de caja de un local de la cadena Vea, localizado en la avenida Alem al 200, comentó que no atendieron consultas del público. Además, remarcó que es posible que, en el futuro, se informe sobre descuentos para la compra de productos, similares a los que se ofrecen con la tarjeta que emite la empresa. "Con esto, probablemente, en los próximos días la gente se acerque y quiera saber más sobre este servicio", opinó. El panorama fue parecido en un salón de ventas de Carrefour, ubicado en San Martín al 300, donde informaron que el público también mostró poco interés. En tanto, desde el supermercado Jumbo, que opera en el Shopping Portal Tucumán, en Yerba Buena, señalaron que hubo mínimas consultas, pero indicaron que aún aguardan las instrucciones de la casa matriz sobre las condiciones para emitir e implementar el nuevo plástico.

La inflación
Los clientes entrevistados por LA GACETA coincidieron en que no conocen con precisión los beneficios de la Supercard. La Secretaría de Comercio Interior, a cargo de Guillermo Moreno, ha puesto como fecha de lanzamiento el primer día de abril. Olga Rivas manifestó que no pedirá la tarjeta debido a que, según dijo, no ofrece beneficios para los consumidores. "No creo que me favorezca porque el Gobierno no controla el principal problema que es la inflación. Los únicos que ganarán serán los supermercados", opinó la ama de casa, en referencia a que el uso del plástico contemplará una comisión del 1%, en reemplazo del 3% que cobran las tarjetas que emiten los bancos a los establecimientos. 

Una postura similar expuso Sandra Villarroel, quien señaló que el congelamiento de precios que busca el oficialismo no resolverá la pérdida del poder adquisitivo. "La Supercard es un remedio que durará poco tiempo. Después de los 60 días (que se extenderá el congelamiento de precios), comprar en el súper será igual de caro", consideró. Por su parte, Diego Sotomayor aseguró que aunque los comercios paguen menos comisión por el uso de las tarjetas, los precios seguirán iguales. "Los que capitalizarán esa merma son los supermercados. No me parece una medida creíble para estabilizar los precios en las góndolas", subrayó.

La tarjeta de crédito Supercard es gratuita y ya está en vigencia desde ayer en los supermercados, según informó el Gobierno. El servicio se puede obtener en los locales comerciales con la presentación del DNI del consumidor y un servicio público a su nombre, y se opera de forma "virtual" hasta que se tramite el plástico definitivo. La Supercard no reemplaza a las otras tarjetas de crédito, ya que podrán utilizarse junto al nuevo servicio, al menos mientras duren las negociaciones entre los supermercados y el resto de las tarjetas para bajar las comisiones.

Requisitos
¿Para qué sirve la Supercard? Para efectuar compras de hasta $ 3.000. Es emitida por los supermercados. 

¿Dónde se utiliza? Por ahora, en Carrefour, Jumbo Retail, Coto, La Anónima, Wal Mart, Día %, Libertad y Cooperativa Obrera de Bahía Blanca.

¿Cómo la consigo? En los súper adheridos al sistema. Hay que llevar DNI, boleta de servicio a su nombre y recibo de sueldos.

¿Cuál es el costo? La emisión de la tarjeta es gratis. Tendrá un costo de financiamiento de 1% (inferior al 3% de tarjetas tradicionales).

¿Qué hago si tengo otra tarjeta? Según el Gobierno, la Supercard convivirá con los otros plásticos emitidos por las grandes cadenas.